Las varices no son más que la dilatación de las venas que dificultan la circulación de la sangre a través de ellas, es muy común que las mujeres, que trabajan día a día sentadas o mucho tiempo de pie las padezcan.
Debido a la falta de movimiento, para ello, se deben realizar una serie de ejercicios que ayuden a tratar las varices, son una afección circulatoria común después de la hipertensión, si estas no son tratadas pueden causar problemas graves como trombosis o ulceras.
Las causas mas frecuentes de presencia de varices son la edad, los cambios hormonales, el sobrepeso, problemas de circulación congénitos, entre otros. Este problema es muy común en países occidentales, el cambio en los hábitos es fundamental para iniciar el tratamiento.
La actividad física es una de las vías más eficaces para evitar la aparición o reducirlas, no solo favorece la circulación sino a fortalecer los músculos de las piernas. No es necesario tener un tratamiento intensivo y riguroso, se pueden emplear rutinas fáciles para llevar a cabo en casa sin usar maquinas.
Pedaleo
Ideal para tratar las varices, consiste en realizar el simulacro de que estas pedaleando una bicicleta en el aire, puedes realizarlo en la cama o en una estera para yoga, pedalea unas 30 veces y repite cuantas veces quieras con descanso entre cada sesión. En caso de estar iniciando, debes emplear pocas repeticiones y luego aumentarlas de forma progresiva.
Separación de piernas
Este ejercicio se puede realizar en el suelo, sentado en una silla o alfombra, también en la cama, requiere algo de fuerza, pero la idea es fortalecer las piernas, estos son los pasos a seguir: Levanta las piernas y llevarlas de arriba hacia abajo, juntando la punta de los pies, puedes intentar hacer 20 repeticiones, con descansos entre sección, todo depende de la condición física.
Giros
Para realizar este ejercicio, se debe recostar sobre una estera de yoga, alfombra o cama y levanta una pierna, con esta realiza movimientos en el sentido de las agujas del reloj, nos 20 giros y luego se repite con la otra pierna en sentido contrario.
Flexión talón- punta
Este ejercicio es bueno para la circulación, si tienes calambres, se puede realizar todas las noches antes de dormir o en la mañana, después de levantarte, lo mejor es hacerlo sentado, apoyar los talones en el piso y levanta la punta de los pies, luego baja la punta de los pies y sube los talones. Repite de 20 a 30 veces.
Flexiones de los dedos de los pies
Es ideal para mejorar el retorno venoso, tonifica los músculos de las pantorrillas, se realiza así: Acostarse sobre la cama o una alfombra en el piso y extiende las piernas, luego flexiona los dedos hacia delante y hacia atrás, repite unas cada 20 veces con cada pierna.
Puntillas o talones
Andar en puntillas o de talones contribuye a estirar los músculos y evitar los espasmos, puede permanecer en un mismo lugar y caminar de puntilla o con los talones, repítelo cada vez que quieras y descansa entre cada sesión.