Mis 5 antipropósitos fáciles de cumplir
Has vuelto de las vacaciones y ya te has puesto la lista de los buenos propósitos como desafío para los próximos meses. ¿Y si en cambio probaras con fijarte simples “antipropósitos”? Siéntete bien aceptándote tal y como eres y siendo capaz de cumplir tus objetivos.

© Getty Images
Cansada de los buenos propósitos que se fijaba y nunca cumplía, Gretchen Rubin, la autora estadounidense de “Operación Felicidad: Un año para aprender a…”, nos desvela su credo: amarse tal como se es, no tender a la perfección, optar por microcambios fáciles de implementar... y reírse de ellos si no se concretan.
Me acuesto más temprano
Por lo general duermes menos de las seis u ocho horas recomendadas por los médicos. Dormir poco puede ser una de las razones para explicar tu mal humor, ya casi crónico. Por si no lo sabes o lo has olvidado, la falta de sueño debilita el sistema inmunológico, disminuye el metabolismo y reduce la resistencia al estrés.
Mi nuevo antipropósito: En vez de leer, ver la televisión, ordenar papeles o vaciar el lavavajillas... "Apago la luz", confía la autora. Ejemplo: Por la noche, en casa, te caes de cansancio pero no te decides entre ir a la cama o ver una película con tu marido. ¿Paso tiempo con mi pareja o me acuesto a las 21.30?
El truco Gretchen Rubin: Ve a la habitación y asegúrate de que esté completamente a oscuras. Apaga el teléfono, el ordenador, el módem y otros artilugios que parpadean y convierten tu cuarto en la cabina de mandos de un avión. Junto al silencio, la oscuridad es la clave para dormir profundamente y despertar descansada y con buen ánimo.
Me enfado con criterio
Los conflictos de pareja se clasifican en dos categorías: los que se pueden resolver y los que no. "No estar siempre de acuerdo es inevitable y a menudo, beneficioso", señala Rubin. De hecho, en su libro, nos enteramos de que a veces en medio de una conversación banal se pone a gritar a todo pulmón. Una vez aceptado el hecho de que vas a pelearte, se trata de hacerlo de una manera diferente de la habitual.
Mi nuevo antipropósito: Me permito unos cuantos gritos con la condición de no alargar la discusión interminablemente. Se trata de aplicar el principio del doctor John Gottman y su laboratorio del amor: la forma en que las parejas discuten es más importante que la frecuencia de los conflictos.
El truco Gretchen Rubin: En caso de pelea, pon sobre la mesa un solo asunto y evita, como ocurre a menudo, pasar revista a todas las fuentes de conflicto… A la larga, esto puede tener efectos devastadores para la pareja.
Me permito hacer tonterías
Tendrías que conseguirlo… Al menos esta vez… El orden no es lo tuyo, pero tampoco ir a la compra. Desbordada, le pides ayuda a tu pareja. Tu chico va al mercado pero en vez del queso manchego que le encargaste, te trae un trozo de queso fresco. Y tú, en vez de agradecerle la ayuda, le criticas por el error. Lo que te pasa es que a fuerza de presionarte, te tomas las cosas demasiado en serio y pierdes el sentido del humor. Está bien que hayas resuelto ser más organizada, pero no a costa de los que te rodean o de tu bienestar.
Mi nuevo antipropósito: En lugar de tomarme todo tan en serio, me tomo tiempo para hacerme la payasa y destilar buen humor a mi alrededor. ¿Por qué funciona? Los estudios muestran que por un fenómeno llamado contagio emocional somos permeables al estado de ánimo de los demás, sean buenos o malos.
El truco Gretchen Rubin: La próxima vez que desempaquetes la compra, usa dos mandarinas para hacerte los ojos saltones o ponte un cuarto de naranja en la boca… A lo largo del día busca oportunidades de ver el lado divertido de las cosas y hacer bromas... ¡en vez de quejarte!
Me doy permiso para mini derroches
Dinero y felicidad no siempre están relacionados. Pero aún en períodos de crisis, tener que estar siempre controlándose conduce a la frustración.
Mi nuevo antipropósito: Sin caer en el extremo opuesto -la compra compulsiva-, gastar para darse gustos contribuye a la felicidad. Estudios demuestran que psicológicamente tenemos la necesidad de sentirnos seguros, amar nuestro trabajo y mantener buenas relaciones con los demás. El dinero no garantiza la felicidad, pero ayuda.
El truco Gretchen Rubin:
- En la oficina: Hasta el día de hoy te conformabas con los bolígrafos que encontrabas en el armario de suministros. Cede a la tentación de comprarte cuadernos y bolígrafos especiales que te alegren el estado de ánimo. Después de todo, pasas un montón de tiempo allí.
- Con los demás: Organiza pequeños festivales en torno a pequeños eventos: tu quinto mes en pareja, una victoria de Greenpeace, noche de luna llena, el comienzo de la primavera… Tendrás gastos extra, de acuerdo, pero será también fuente de felicidad...
- Para ti: Conviértete en tu mejor amiga y date caprichos de vez en cuando.
Estimulo mi cerebro de manera diferente
Nuestro cerebro tiene tendencia a señalar lo negativo. Como lo explica el renombrado psicoterapeuta Thierry Janssen, "frente a ciertas situaciones percibidas como peligrosas, el ser humano recibe señales que llamamos emociones negativas". Parecería que esto está relacionado con nuestro instinto de supervivencia.
Mi nuevo antipropósito: Utilizo mi cerebro de manera diferente con el fin de disfrutar plenamente de los momentos presentes y ver el lado positivo de la vida. No se trata de hacer cambios radicales sino pequeños ajustes cotidianos.
El truco Gretchen Rubin:
- En la oficina: Es probable que pases el día escribiendo contraseñas que olvidas inmediatamente. La autora sugiere utilices para éstas palabras relacionadas con tus gustos y pasiones. Por ejemplo, si te encanta la cocina exótica, escoge palabras relacionadas: curry, pad thai, ramen… Este tipo de claves harán iluminar las conexiones neuronales del placer.
- En casa: Coloca en los lugares que visitas frecuentemente notas adhesivas con mensajes que te levanten la moral. Por ejemplo,”Soy una persona excepcional”. Y si hay un mensaje que debes recordar, es este.
C. Maillard

- El deseo de cambio: ¿evolución o huida?
- ¿De dónde viene el frenesí consumista?
- Cómo desarrollar tu creatividad
- Ser más intuitiva
- Superar la crisis de la mediana edad
- Arriésgate a ser feliz
- Ecología Emocional
- ¡Saber decir gracias, un pasito hacia la felicidad!
- Más inteligente gracias a la música
- Holosíntesis: ¿en qué consiste?
- Recobrar el optimismo
- La fragilidad: ¡una ventaja a la hora de relacionarse!
- Cuando se te enciende la bombilla: ¡una toma de conciencia liberadora!
- El mundo interior de Vega Royo-Villanova
- ¡La suerte se provoca!
- ¡Exprésate… con humor!
- Pon punto final a los malos hábitos
- Propósitos para ser feliz
- Cultiva tu jardín interior
- ¿Sabes seducir?
- Cinco claves para potenciar tu suerte
- Mis 4 acuerdos toltecas para una nueva era
- Tómate la vida con humor
- Aprende a desarrollar tu intuición
- Deja de intentar ser perfecto
- La poesía, una nueva terapia
- Ser coherente consigo mismo. La clave de una vida en armonía
- Soy impulsivo, ¿qué hago?
- ¿Tendré la crisis de los 40? - El psicólogo responde
- ¡Haz las paces con tu pasado!
- El sentimiento de culpa no siempre es negativo
- La grafología en 10 preguntas
- Soy demasiado susceptible…¿qué hago?
- Paciencia, ¿virtud o defecto?
- El camino de la búsqueda del bienestar no tiene fin, termina cuando termina la vida
- Consigue estar en armonía con tu ego
- ¡Haz el test de Rorschach en línea!
- ¿Por qué no consigues tus objetivos?
- Los adultos y los libros para colorear
- ¿Tienes el Síndrome del Impostor?
- Aprender de los errores: virtudes del fracaso
- La resistencia al cambio
- Cómo superar las decepciones
- ¿Cómo aceptar un cumplido?
- Claves para tener una actitud positiva en seis pasos
- El síndrome de estrés postraumático
- Prevenir el estrés para evitar la depresión
- Cómo dejar de llegar tarde
- Personalidad de tipo A: características y relación con las enfermedades cardiovasculares
- La personalidad sumisa o dependiente: ¿Es posible cambiar?
- Nuevas terapias psicológicas: constelaciones familiares
- ¿Por qué se es zurdo?
Más información sobre este tema: